domingo, 31 de enero de 2010

Una de arroz negro

Hoy hemos tenido una jornada gastronómica de lo más apañada. Atrás quedaron los días en que Sissay nos embutía en el gaznate un puñado de injera con sus propias manos. Casi un año después de conocernos en la "Nueva Flor", seguimos manteniendo una buena amistad, que irá consolidándose en el tiempo.

Hoy hemos repetido cocinero. De hecho creo que siempre que nos hemos juntado ha cocinado él. Después de darnos una lección de cómo se hace un all-i-oli campeón para una buena torrà, y chuparnos los dedos con su arroz a banda y su paella, hoy por fin hemos podido catar su "world famous" arroz negro. Amén de un Bombweppes para después de los postres (dicen que ayuda a hacer la digestión)

Primero se sofríe bien la sepia, el calamar y las gambas

Un poco de tomate para darle buen sabor

El arroz en crudo

Se añade el caldo de pescado y la tinta de calamar

Un toque de pimienta negra molida y dejar reposar

Un poco de adorno, y a comer, que para eso se ha hecho

Pero no ha sido la única nota de talento gastronómico de hoy, ya que Lorena ha traído una buena dosis de ajoarriero, para después disfrutar a los postres con las cocas de Josefina.

Además he aprovechado que ha salido el día soleado (por fin, tras unas semanas de lluvia, viento y frío) para sacar a pasear a mi tigresa, pero como sospechaba, tanto tiempo sin escuchar el rugir de su motor han acabado agotando su batería, con lo que Pat me ha tenido que echar un cable y la batería de su coche para poder arrancar la moto.

Por cierto, Bombweppes es Bombay con Schweppes.