Cantaba el Dúo Dinámico aquello de "el final del verano llegó". Ahora podrían cantar algo por el final de las Navidades, que ya llegaron (afortunadamente). Se acabaron las cenas, las comidas, los regalos, las idas y venidas aquí y allá, morderse la lengua delante de los niños para, ahora lo puedo decir bien alto, LOS REYES MAGOS NO EXISTEN, y Papá Noel lo inventó la Coca-Cola (¿leyenda urbana?).
Se acabó el estrés, aunque ahora llegará otro: el laboral. Pero ese lo dejo para la semana que viene, que aún me quedan vacaciones.
Esta tarde hemos quedado con los amigos a tomar el roscón de Reyes en casa de Carmen. Patrocinado por Emilio, para celebrar su cumpleaños. Debo decir que ha estado acertadísimo. No he tenido que discutir con mi media naranja sobre el relleno del pastel. La mitad relleno de nata y la otra mitad relleno de cabello de ángel (como debe ser, por supuesto).
El invitado de piedra momentos antes de ser sacrificado
Luego ha recibido una serie de regalos muy eróticos (el de Vicky..que rule!!!), hasta el punto que a un sujeta gafas le ha buscado su uso como juguete sexual.
En casa de Carmen no podía faltar la joya de la corona. Un festín de chocolate. Una lujuria pecaminosa. Sus famosos brownies. Aunque ella lo hace con cariño y con ganas, debo decir que somos unos abusones. Había que ver cómo mirábamos con deseo el cuerpo del delito...
Ven a mí, pequeño bocadito de chocolate
En fin, espero que el año que viene podamos repetir todos, y que vengan los que hoy no han podido venir, y que yo pueda disfrutar del wi-fi de Carmen...(¿lo pillas, Pat?).
Seguiremos informando.
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