Hace dos años, cuando la selección española de fútbol ganó la Eurocopa, alguien me llamó antipatriota cuando le comenté que no había visto el partido por la tele. El fútbol no me interesa lo más mínimo, juegue quien juegue. Es un deporte que me aburre. Luego resulta que ese "alguien" ni tan siquiera sabía que España había ganado el mundial y el europeo de baloncesto. ¿Y se atreve a llamarme antipatriota?
Durante las olimpiadas de Pekín, una locutora de la cadena COPE que se las da de muy española (aunque tenga un apellido alemán) criticaba a unos tenistas españoles porque no jugaban con la camiseta roja. Decía que no eran patriotas como Rafa Nadal, que él sí que jugaba de rojo. Señora, he de decirle que el patriotismo de un deportista no está en el color de su camiseta, sino en el escudo que lleva en ella.
Durante este mes, hemos tenido que ver cómo todas las cadenas de TV modificaban sus contenidos en torno al fútbol. Hasta Belén Esteban y sus compañeros acudían a Sálvame con la camiseta de la selección española. ¿Harán lo mismo cuando a finales de agosto la selección española de baloncesto defienda su título en el mundial de Turquía? Ya me respondo yo mismo....
Hablando de camisetas, encuentro ridículos a los que van por la calle con camisetas de fútbol (sean de la selección o de un club). A ningún aficionado a los toros se le ocurre ir vestido de torero por la calle.
Ya para terminar, espero que mañana gane España, que aunque se siga llamando La Roja, jugarán la final vestidos de azul. Y todas aquellas marcas comerciales que prometían devolver el dinero de las compras si ganaba España el mundial, ya saben....